viernes, 20 de enero de 2012

RESPIRANDO LOS ELEMENTOS



Busca un momento para regalarte vida plena y consciente.
Introduce la llave de la atención en la cerradura del cuerpo.
Fíjate en el lugar concreto de tu nariz dónde percibes el aire.
Déjate mecer…. el aire entra, el aire sale…..

Los pensamientos llegan…. y te atrapan… o se van.
Como blancas nubes en un cielo azul, déjalas pasar.
Y en proceso: suelta la carga, afloja el cuerpo.

Invoca al elemento Tierra. Elige y pasea por ella.
Redescubre cada aspecto, evócala desde cada sentido
Hasta que tu mente te perciba piel con musgo. Fusión plena.

En ese momento elige a tus custodios, los cuatro aliados del reino animal.
Uno a uno míralos llegar y ubicarse en torno.
Con ellos a tu lado, danza hasta que llueva,
Danza hasta derrotar toda resistencia.
Danza hasta que la lluvia te deje primigenia.
Y vístete de barro. Confúndete con la tierra.

Invoca, evoca al elemento Agua, que canta cerca,
En la cascada y en el arroyo que serpentea.
Húndete en las ondas hasta que no quede huella
Ni de ti ni de la tierra. Y mojada de nuevo tiéndete en la espera.
Para escuchar el susurro de los ríos de sangre bajo tu piel nueva.

Sopla la brisa del cabo. Se enarbola el viento.
Llevándose de tu piel todo rastro, secando cada surco
Hasta mostrarte el vendaval de tu propio latido
Que con cada respiración consciente hincha el velamen
De tu navío y te lleva a puerto seguro.

Hasta que alcances la luz, será el aire tu vehiculo vital,
La energía que mueva el molino de tu falsa identidad.

Detenlo todo, cuelga la mirada en el punto cero.
Mediodía. Sin sombra. Con el lucero en el centro del cielo.
Sol que da vida. Sol que mata. Entrega cada poro a la luz dorada.
Percibe como avanza hasta el fondo, atravesando piel y polvo.
Decanta. La vida se arruga, deshidrata, desparrama,
Muestra la blanca arboladura que nada desplaza.

Y que la luz de tu conciencia alumbra,
De nuevo, en el útero de la vida,
Esta vez plena. Porque se sabe vacía.
Por que se sabe vacía decide, elige, con qué la llena.

Carmen Andrés de Miguel. Homeopata. 2011

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