jueves, 23 de junio de 2011

PORQUÉ TIEMBLA EL FLAN DE HUEVO

1º Premio del 1º concurso de monólogos de “jironesdeluz”


En primera instancia, nuestra inalterable racionalidad, nos llevaría directamente a pensar que tiemblan de pavor, de miedo al verse ante ese enorme ser omnívoro que cucharilla en mano y con restos de paella en la boca, nos mira con ojos lascivos para convertirnos en la antesala de su carajillo.

Nada más lejos de la realidad; si miramos con más detenimiento, nos daremos cuenta de que en realidad no tiembla, si no que se balancea, hinchado de orgullo; ello es fácilmente demostrable pues su movimiento no varía por las condiciones atmosféricas; haga frio o calor su movimiento perdura, incluso sometiéndolo a las extremas condiciones de un congelador, el seguirá moviéndose; de hecho la famosa frase “y sin embargo se mueve” de Galileo Galilei, atribuida al movimiento terrestre, en realidad estaba dedicada a un flan.

En su disparatada ignorancia se ve a sí mismo como el centro del su universo conocido, el culmen de la creación culinaria y para ello expone mil razones; sus tres principales, ancestrales y básicos ingredientes; la leche, la cual ha alimentado a la humanidad desde tiempos ignotos; el huevo (o la gallina), tanto monta, monta tanto, cuya aparición se remonta a la noche de los tiempos y el blanco azúcar, el maná de nuestros días.

A ello une su omnipresencia en las mesas españolas, tanto en hogares como en restaurantes , en las que supera por goleada a sus rivales; a la blanca y desangelada cuajada, siempre huérfana de miel; a las natillas que avergonzadas, ocultan su trasnochado corazón de galleta barata; el yogurt, que aunque de colores “pastel”, su sabor sea de saborizante autorizado; al helado, difícil de comer en su propio caparazón de plástico , con una demasiado endeble cucharilla y la fruta del tiempo, que más parece un adorno de cera por las jornadas que permanece inmutable sin que nadie la consuma.

El flan de huevo, no el del envase plástico con tetilla inferior que siempre se rompe sin lograr su extracción sobre el platillo, obligándonos a consumirlo en su propio envase, privándonos de la magnificencia de ver al retirar poco a poco el envase, ese fenomenal cuerpo troncocónico de irisados colores, para derramarse sobre él un sabroso manto del azúcar caramelizado; si no al flan casero, el de la abuela, el fetén, con sus poros y canalillos laterales, simulando columnas jónicas. Un buen flan, ha de ser cremoso, terso y resbaladizo hasta tal punto que sea cuasi imposible colocar sobre la cucharilla ese último resto que tras recorrer todo el plato, le obligaremos a “subir”, comprobando que nuestra acción queda inadvertida a la concurrencia, con una ligera ayuda de nuestros dedos.

En los supermercados y bares con menú del día acostumbran a trivializar su sabor, con atrevidas mezclas de dudoso valor alimenticio como el de sabor a chocolate, vainilla, café, manzana, etc.; para más inri, en bodas y bautizos se le suele flan-quear con sendos trozos de piña y melocotón de lata y helado, degradándolo más si cabe con el pomposo nombre de “pijama”.

En fin el flan de huevo, sigue creyendo en si mismo y mira al futuro con esperanza. De hecho recientes investigaciones de el “Earthquake Research Institute at the University of Tokyo”, está ensayando con éxito la detección precoz de terremotos y tsunamis, con un simple flan de huevo. A su vez se cree que si los avances tecnológicos lo permiten, llegará a convertirse en una nueva y sabrosa silicona con la que realizar implantes mamarios y poder perdurar por más largos periodos de tiempo en el organismo de los seres humanos, que en el fondo es el sueño frustrado de todo flan que se precie.

Buen Provecho

viernes, 17 de junio de 2011

ELOGIO DE LA VAGANCIA

Vago: gandul, perezoso, holgazán, dejado, ocioso, haragán, remolón, zángano, etc.

Vago: vacio, desocupado, indeterminado, abstracto, neutro, absoluto.

Siempre he pensado que algún antepasado mío debió de ser de sangre azul, por la palpable animadversión que siento hacia el trabajo y creo que represento en esta idea a la mayoría de ciudadanos de los llamados países del primer mundo; trabajar para vivir o vivir para trabajar, no parecen las dos únicas alternativas, quizás la más saludable seria solamente “vivir”, en ello se incluiría alguna actividad física, lógica y saludable, pero nada que ver con el “trabajo”, propio de siervos o esclavos.

Trabajo: esfuerzo hecho por los seres humanos, con la finalidad de producir “riqueza”.

Esclavitud: trabajo forzoso, donde un hombre domina a otro y le impide tomar decisiones en libertad.

Según estos conceptos, no parece ni humano ni saludable el trabajar, ni mucho menos cuando el concepto de “riqueza” es tan vulnerable y cambiante; pensemos en solo 50 años atrás, el concepto de riqueza de nuestros abuelos, en un magnate árabe o en el de un desahuciado de Haití; en nada se parecen, a excepción de que todos ellos son deseos, unos más acuciantes que otros, pero deseos.

Ser un vago, no es tarea fácil y conlleva años de entrenamiento; no un vago de sofá y tele, sino un vago integral, parada total de oído , olfato , gusto, extremidades , ojo (un amigo mío lo tiene pero no es suficiente); la contemplación en suma. Intenta por unas horas estar quieto, parado, sin radio, sin t.v., sin hablar, sin escuchar, sin moverte. . . .sin pensar.; no es nada fácil. No hace falta militar en ninguna orden ni adoptar posturas raras; simplemente tumbado a la sombra de un pino, aislado del mundo y a la vez fundido con él, una charla de tú a tú con el universo, con la creación que es la única que te comprende, pues estáis hechos de la misma materia, ausencia, absoluta y vaga. Terapia mano de santo oiga.

Todavía en nuestros pueblos más aislados quedan ilustres ejemplos de un buen holgazán de los que tomar ejemplo; boina calada, garrote en mano y cabeza gacha, son los signos que delatan al spanish yogui en meditación profunda; ausentes del mundanal ruido, viajando por universos paralelos; lo mejor es que no hay edad para hacer el gandul, puede practicarse en cualquier sitio y está permitido por la ley; solo necesitas silencio y perseverancia; los beneficios serán de incalculable valor para ti, (algo menos para Hacienda).

En la India los vagabundos son venerados y respetados por la población, como renunciantes de la vida mundana, los sadhu deambulan por las ciudades o los bosques en búsqueda de la liberación.

Vagabundo: Que va de un lugar a otro sin un fin determinado. Errante ¿No os parece la definición perfecta para nuestras vidas?

Abandónate, siéntate sin ningún propósito, sin ningún esfuerzo; se vago, se feliz, se tu mismo. Dicen los que viven de nosotros que el mundo se pararía y seguramente así seria “su mundo”.
 ¿Probamos?

lunes, 6 de junio de 2011

BACTERIA MUTANTE


Anda un gran número de sesudos científicos a la caza de la bacteria que está provocando un gran revuelo en Alemania, atribuido en primera instancia a los pepinos españoles y en segunda a una bacteria mutante de desconocido origen y que parece ser que se propagó en un lujoso restaurante de reluciente y aséptica cocina, así como una brillante e inmaculada cristalería.

Una vez más, se les escapa a los dirigentes sanitarios, un cabo de su supuestamente bien atado sistema de control sanitario; les ha salido una bacteria rebelde, una chica mala que ha puesto patas arriba toda su parafernalia de instrumentos para combatir el peligroso organismo invasor.

Exhaustivos controles sanitarios, ambientes extra limpios, guantes, gorros y mascarillas no han podido cortar el paso de este escurridizo y nuevo adversario que se transforma cual virus de la gripe en un enmascarado rival.

Quizá ese rival no sea tan potente y malvado como lo pintan y más bien seamos nosotros quienes no estemos preparados para esta desigual lucha; en los últimos tiempos nuestra capacidad de defensa (sistema inmunitario) está dando síntomas de agotamiento; demasiados antibióticos, demasiado stress, contaminación, química en la alimentación, etc. debilitan nuestro organismo que incapaz de enfrentarse con grandes retos, delega en la farmacia su mayor poder de persuasión.

Nuestros abuelos, al igual como en países del tercer mundo, el contacto con la suciedad, andar descalzos, el uso menos frecuente de jabones y hasta la no proliferación de vacunas, inmunizaban y creaban la necesidad de un organismo en perenne alerta contra intrusos. Nosotros utilizamos la estrategia del alejamiento, poniendo distancia con jabones , detergentes, colonias, cremas, desodorantes, lejías, ambientadores, etc.; nuestros niños habitan en una burbuja aislada de un medio natural, ayudados por estufas y aires acondicionados, sin posibilidad de desarrollar el potencial que nuestro organismo tiene para estas nuevas bacterias mutantes.

Añoro los puestos de comida ambulante en india que comí con total confianza, descalzo y con las manos; recelo de los restaurantes relucientes, de camarero con pajarita y mesas con olor a Mr. Propper; suele haber una relación inversa entre calidad y presentación; la tortilla de la abuela, sería otra cosa en un local VIP.

martes, 24 de mayo de 2011

LA NATURALEZA VACIA DEL YO

Nadie puede confirmarnos que somos, aunque todo el mundo trata de decirnos lo que somos. En este ser desnudo y sin etiquetas al que se puede asignar cualquier cualidad —aunque carece en sí mismo de todas ellas— va incluido todo: bueno y malo, positivo y negativo, luz y oscuridad, placer y dolor, palabras y silencio. Ese ser desnudo, según el budismo, está tan desnudo que trasciende los calificativos de ser y no-ser, de existencia e inexistencia o, como se dice en términos tradicionales budistas, está más allá de los extremos del eternalismo y el nihilismo. No se le puede aplicar ninguna de las cuatro posibilidades lógicas: es, no es, es y no es, y ni es ni no es. Escapa a cualquier concepto y los incluye a todos.

Podemos poner en duda no sólo nuestra manera de ser sino también nuestra manera de existir. Por ejemplo, ¿acaso la existencia del yo resulta tan evidente? Ese yo cuya existencia parecía legitimada, para Descartes, por la presencia misma del pensar, ¿en qué zona del cuerpo se halla ubicado? ¿En la cabeza, en el tronco, en las extremidades? ¿Es posible que el yo resida en el cerebro? Si fuera posible trasplantar el cerebro de un individuo a otro ¿cambiaría por ello su sensación de identidad? Cuando se amputa un miembro ¿podemos decir que el yo ha sufrido también una amputación? ¿Cuando cambia la forma del cuerpo, cambia también la forma del yo? Ahora que está tan de moda la cirugía plástica, ¿las personas que se cambian la nariz, los pechos, el color de los ojos, etcétera, experimentan por ello algún cambio en su sensación de identidad? Rotundamente, no. Es absolutamente imposible identificar el yo con ninguna parte del cuerpo o con la totalidad del mismo.

En ese caso, es posible que el yo exista separadamente del cuerpo pero esta posición también parece absurda y poco obvia porque, en tal caso, ¿qué necesidad habría de un yo que no mantiene relación ninguna con el cuerpo?

Entonces quizás sea posible localizar al yo en los sentimientos. Pero éstos, como sabemos, cambian rápidamente, de modo que si un día nos identificamos con el apego o lo que llamamos amor, al día siguiente nos identificamos con el rechazo y el odio. Un mismo objeto o persona puede generar en nosotros sentimientos muy contradictorios a lo largo del tiempo. Por su parte, la vida fugaz de los pensamientos parece demasiado fluctuante para que pueda ser el asiento permanente del yo.

Sin embargo, tampoco parece prudente concluir que el yo no existe en modo alguno puesto que constituye el centro de nuestra vida física, emocional y mental. Sin embargo, es imposible verlo o percibirlo directamente. Sólo vemos sus reflejos, aunque no haya nadie ante el espejo. Es imposible convertir al sujeto en un objeto. Cualquier cualidad que asignemos al sujeto no le pertenece porque las cualidades y las determinaciones pertenecen a la esfera de los objetos.

El yo es una superposición efectuada sobre un flujo de pensamientos, sensaciones, percepciones, etc., más o menos sutiles. Sólo hay que dejar fluir, con la menor interferencia posible de nuestra parte, los pensamientos que sostienen la identificación del yo .

El camino pasa, pues, por la deconstrucción y la revisión de nuestros procesos perceptivos, afectivos y cognitivos. Tenemos que comprender cómo funciona la realidad intentando contemplarla desde diferentes perspectivas y también, en la medida de lo posible, desde ninguna perspectiva en absoluto o, si se prefiere, desde la perspectiva del no-yo. El camino es la duda, es decir, la indagación directa de lo que aparece, poniendo entre paréntesis o en tela de juicio hasta nuestras asunciones más evidentes y cotidianas.

jueves, 19 de mayo de 2011

EL MARRUBIO

El Marrubio, ( marrubium vulgare L.) es una de esas plantas que la comercialización ha dejado de lado, quizás por su cercanía y proliferación; este mes de mayo está perfecta para su recolección; se encuentra en muchos de los bancales y ribazos olvidados de las afueras de cualquiera de nuestros pueblos valencianos.


Recolección: segar la parte aérea de la planta (tallos tiernos), secar a la sombra en lugar aireado. Guardar en envase de papel o cartón.

Esta planta perenne de la familia de las labiadas, suele llegar hasta los 1,20 cm. de altura, Las hojas de esta planta medicinal son arrugadas, grisáceas por arriba y en el envés de color blanquecino. Son las sumidades floridas las que concentran en mayor proporción los principios activos de la planta que la convierten en un eficaz remedio contra las afecciones respiratorias. El principio activo está constituido por la marrubiína. Además, abundan otros componentes como marrubiol, peregrinol, vulgarol, flavonoides, taninos, mucílagos, sales minerales como el hierro y el potasio, así como vitamina C.

Por sus propiedades antitusígenas es una planta especialmente indicada para tratar los resfriados, bronquitis, ataques agudos de asma, y sobre todo, todas aquellas afecciones respiratorias acompañadas de tos, ya que hace más fluidas las secreciones bronquiales. Además, el marrubio estimula el apetito que normalmente se pierde cuando se está resfriado y desganado.

Es expectorante, antiséptico, febrífugo, buen tónico del aparato digestivo y del corazón además de colerético (estimula la función de la vesícula biliar).

La infusión se prepara con 10 a 30 gr. por litro de agua; se vierte agua hirviendo sobre él, se tapa y se deja reposar 5 minutos; yo suelo añadirle una nube de leche, miel o azúcar de caña; tiene un agradable y peculiar sabor amargo.

Dosis: infusión, 3 tazas al día, antes de las comidas.

viernes, 13 de mayo de 2011

POEMA RIO TURIA


Pescador de sí mismo. Ser uno con el río
Y que la presa se entregue a su fluido destino.

De gusano a pez.
Después a piel de tu geografía inmensa.

Tal vez axón o molécula.
En el perfecto ensamblaje de tus agregados,
Cuerpo humano, aún humano.

Dilucidando meta, decantando destino
Junto al murmullo del río.

En su canción que acuna
Todos los anhelos que se remansan
Ante el espectáculo que no cesa.

Desde el dulce matiz otoñal a la ventisca
Que azota y brama entre las ramas
Para dejar tras de si mullida alfombra dorada
De fósiles corazones que se encorvan
Ante la disolución de su forma.

Como no empecinarnos en el néctar
Que se nos regala, que nos abraza sin lacerar
Igual que este sol otoñal.

En la tapizada alfombra dónde puedo
Abrir mi corazón y dejar que el jilguero
Y la onda en el agua me recuerde,
Permitan una reunión anticipada.

Que esto solo es el regalo de bienvenida
A la vida-muerte que todo lo alcanza.
……………………………………………..
Carmen Andrés de Miguel. Río Turia, 5-10-10

lunes, 25 de abril de 2011

LA MAFIA MEDICA

La mafia médica” es el título del libro que le costó a la doctora Ghislaine Lanctot su expulsión del colegio de médicos y la retirada de su licencia para ejercer medicina. Se trata probablemente de la denuncia publicada más completa, integral, explícita y clara del papel que juega a nivel mundial el complejo formado por el Sistema Sanitario y las industria farmacéutica.

Además de tratar sobre la verdadera naturaleza de las enfermedades, explica cómo las grandes empresas farmacéuticas controlan no sólo la investigación sino también la docencia médica, y cómo se ha creado un Sistema Sanitario basado en la enfermedad en lugar de en la salud, que cronifica enfermedades y mantiene a los ciudadanos ignorantes y dependientes de él.

El libro es pura artillería pesada contra todos los miedos y mentiras que destrozan nuestra salud y nuestra capacidad de autorregulación natural, volviéndonos manipulables y completamente dependientes del sistema.

A continuación, un pequeño extracto de la entrevista a la autora que realizó Laura Jimeno Muñoz para Discovery Salud.

La Medicina está hoy controlada por los seguros -públicos o privados, da igual- porque en cuanto alguien tiene un seguro pierde el control sobre el tipo de medicina al que accede. Ya no puede elegir. Es más, los seguros determinan incluso el precio de cada tratamiento y las terapias que se van a practicar.

Es el dinero quien controla totalmente la Medicina. Y lo único que de verdad interesa a quienes manejan este negocio es ganar dinero. ¿Y cómo ganar más? Pues haciendo que la gente esté enferma … porque las personas sanas no generan ingresos. La estrategia consiste, en suma, en tener enfermos crónicos que tengan que consumir todo tipo de productos paliativos, es decir, para tratar sólo síntomas; medicamentos para aliviar el dolor, bajar la fiebre, disminuir la inflamación … pero nunca fármacos que puedan resolver una dolencia. Eso no es rentable, no interesa.

La medicina actual está concebida para que la gente permanezca enferma el mayor tiempo posible y compre fármacos; si es posible, toda la vida. Se trata de un sistema que mantiene al paciente en la ignorancia y la dependencia, y al que se estimula para que consuma fármacos de todo tipo.

La medicina científica está enormemente limitada porque se basa en la física materialista de Newton: tal efecto obedece a tal causa. Y, por ende, tal síntoma precede a tal enfermedad y requiere tal tratamiento. Se trata de una medicina que además sólo reconoce lo que se ve, se toca o se mide y niega toda conexión entre las emociones, el pensamiento, la conciencia y el estado de salud del físico. Y cuando se la importuna con algún problema de ese tipo le cuelga la etiqueta de ´enfermedad psicosomática´ al paciente y le envía a casa tras recetarle pastillas para los nervios.

El verdadero médico es uno mismo. Y cuando uno es consciente de su soberanía sobre la salud deja de necesitar terapeutas. El enfermo es el único que puede curarse. Nadie puede hacerlo en su lugar. La autosanación es la única medicina que cura. La cuestión es que el sistema trabaja para que olvidemos nuestra condición de seres soberanos y nos convirtamos en seres sumisos y dependientes. En nuestras manos está, pues, romper esa esclavitud.

La OMS es la organización que establece, en nombre de la salud, la ´política de enfermedad´ en todos los países. Todo el mundo tiene que obedecer ciegamente las directrices de la OMS. No hay escapatoria. De hecho, desde 1977, con la Declaración de Alma Ata, nadie puede escapar de su control.

Fuente: http://holismoplanetario.wordpress.com

miércoles, 13 de abril de 2011

EL SESAMO

El sésamo (Sesamum Indicum) es una planta originaria de la India y de África. Son típicas de muchos platos orientales y ya es muy popular entre nosotros. Se usan las semillas y se comercializan crudas (mucho mejor) o tostadas y las hay blancas, doradas o negras


A nivel de vitaminas, el sésamo posee dos del complejo B (B1 o tiamina y B2 o riboflavina), en cantidad mucho más elevada que cualquier otra semilla oleaginosa. También aporta buena cantidad de vitamina E (tocoferol), que es antioxidante y responsable de los siguientes procesos orgánicos: retardar el envejecimiento, reducir la tasa de colesterol, eliminar los metales tóxicos, mantener el tono muscular y nervioso, la fertilidad, la virilidad y el índice de coagulación. Además el sésamo posee vitaminas B3, B5, B6, K, ácido fólico, biotina, inositol y colina.

En minerales es donde el sésamo se destaca, sobre todo por su alto contenido de calcio biodisponible, 670 mg. por 100 gr. de sésamo crudo, superior a cualquier alimento natural, ciertas variedades superan los 1.100mg, contra los 120mg de la leche. Pero la relevancia del sésamo respecto a los lácteos, es que también contenga los minerales necesarios para que ese contenido de calcio pueda ser fácilmente asimilado por el organismo; nos referimos al magnesio, el fósforo, el silicio, el cinc, el cobre y el boro. Además el sésamo posee la mayoría de los demás nutrientes sinérgicos al calcio: ácidos grasos esenciales, vitaminas y aminoácidos. También posee cantidades importantes de potasio, hierro, selenio, yodo y cromo. Es sumamente recomendable en una alimentación vegetariana.

Se recomienda su uso de las semillas trituradas pues la asimilación de los nutrientes es mucho mayor; para ello podemos hacer nuestro propio “gomasio” que no es ni más ni menos que el sésamo crudo, ligeramente tostado en una sartén a fuego muy lento y sin aceite al que añadiremos una cucharada de sal marina, para a continuación triturar con una batidora; lo usaremos en sustitución de la sal.

También encontramos en el mercado aceite de sésamo, al adquirirlo hay que comprobar que sea de extracción mecánica en frio, pues el excesiva temperatura a la que se somete el refinado hacen que carezca de parte de sus múltiples propiedades.

Otra forma de usarlo es el “tahin” o crema de sésamo, que es muy fácil de hacer y mucho mejor y más barata que la versión comercial; para hacerlo, prepararemos el gomasio y sin sacar del vaso de la batidora, añadiremos poco a poco aceite de semillas, bien de girasol o soja y trituramos hasta formar una crema; deliciosa para untar o para preparar el famoso “hummus”.

Hummus, (crema de garbanzos); chafar o batir garbanzos previamente cocidos, a los que añadiremos un buen chorro de aceite de oliva, dos dientes de ajo machacados, tahin al gusto y un chorrito de zumo de limón. Batirlo hasta formar una pasta cremosa.También admite el comino molido, el yogurt para hacerlo más cremoso y se puede decorar con pimentón rojo.




lunes, 28 de marzo de 2011

EL COCHE INTELIGENTE


Nuestros queridos vehículos de cuatro ruedas, cada vez vienen equipados con más gadgets, tecnología de última hora, que deberían regalar los concesionarios, pues nos convierten en carne de taller irremediablemente y son un acceso directo a nuestra tarjeta bancaria.

Conexiones inalámbricas, detectores de lluvia, de aparcamiento, start-stop, cambio automático, detector de presencia, antisalidas de via; cerraduras por huella digital, control de velocidad, etc., hacen de estos vehículos unos compañeros de viaje a los que solo les falta hablar.

El mío tiene más de12 años, no posee ninguno de estos artilugios y sin embargo ya habla, no es un caso inexplicable, ni tan siquiera extraño, casi diría que todos ellos hablan; como en el caso de el dialogo entre humanos, la premisa básica es querer escucharlos; acercarse con delicadeza, abrir sigilosamente la puerta, entrar de puntillas, sentarse y sin arrancar el motor, quedarse quietecito y en silencio el tiempo que haga falta, hay algunos que tardan 15 minutos, otros un par de horas; a algunos les cuesta romper el hielo, necesitaras varias intentonas y varios días, pero al final hablan, vaya que si hablan.


Entre el mío y yo, puede hablarse ya de amistad, yo le agradezco su puntualidad y sacrificio, a la de sitios hermosos que me ha llevado, cada día al trabajo sin rechistar, a ver a los amigos, me ha esperado pacientemente en los parkings de hospitales y aeropuertos, me ha protegido del viento, la lluvia, el granizo, incluso en alguna frenada brusca ha hecho que el derrapaje fuera en la dirección correcta para no colisionar; le he pedido perdón por que algunas veces lo abandono por la otra, la motocicleta, y me dice que sin problemas, que él no es celoso; vamos es que lo tiene todo.

El me cuenta que la edad no perdona, que ya tiene algún achaque, pero que cada puesta a punto, cambio de ruedas o lavado, recobra nuevas energías; los rasguños en la chapa que no le he reparado, no me los echa en cara y me dice que no me preocupe, que los considera un tunning , que le aporta personalidad; su deseo es seguir conmigo algunos años más y hemos llegado a un pacto de caballeros; por muchos modelos más rápidos, lujosos o atractivos que inunden el mercado, de el saldrá la iniciativa de jubilarse; según él, en su nacimiento y gracias a unos amigos, se libró de la obsolescencia programada y está encantado de hacerles un corte de mangas a los especialistas del marketing.

A la porra, dice, boicot, boicot, boicot. . . y es que es un rebelde con causa.

jueves, 10 de marzo de 2011

MASACRE ANIMAL


Limpieza étnica animal

Con este equitativo artículo, Joel Sangronis Padrón, nos relata la muerte de el último ejemplar de jaguar (felis onca), cuando contaba con 13 años de edad y la barbarie a la que sometemos a nuestros hermanos los animales.

“Soy vida que quiere vivir en medio de vida que quiere vivir…Albert Schweitzer”


En los días anteriores a su muerte, los cuentos y leyendas acerca de la ferocidad y peligrosidad de esa especie fueron la comidilla cotidiana de los habitantes del pueblo, sin embargo, yo no podía dejar de sentir solidaridad y compasión por aquella solitaria y acosada bestia, el último de los suyos en una tierra que ya no le pertenecía; sólo, enfrentando a enemigos miles de veces superiores a él en número y armados con avanzados instrumentos de muerte, sus oportunidades de vivir eran inexistentes.

El cadáver de aquella pobre bestia fue colocado en el capó de la camioneta de uno de mis hermanos para ser exhibido a lo largo de las calles del pueblo. A su pasó, la gente vitoreaba y aplaudía mientras la chiquillería gritaba y daba saltos detrás del vehículo en actitudes simiescas. A nadie le importaba que aquel ejemplar fuera el último de su especie en la región, por el contrario, celebraban con júbilo ese hecho. Aquel necrófilo espectáculo circense, aquella bárbara inconsciencia colectiva, me marcó de por vida. Razón tenía el filósofo Thomas Hobbes cuando afirmó que el ser humano era el animal más feroz, cruel, depredador y peligroso que jamás había existido sobre la tierra.

Traigo esta historia a colación para remarcar la despiadada y salvaje política de exterminio que la mayoría de los 6.700 millones de seres humanos que poblamos la tierra le hemos declarado, desde nuestra aparición, al resto de especies que, por derecho propio, comparten con nosotros este frágil planeta azul. Hoy, esa política se ha potenciado a niveles infernales debido al alucinante desarrollo tecnológico de nuestra capacidad de matar. Cada día, en los mares y océanos, perseguimos a sus habitantes con sonares, señales satelitales y sistemas de posicionamiento global. Especies como el Atún gigante, el rojo y el aleta azul ya se encuentran en peligro crítico de extinción, y no tienen a donde huir, donde esconderse de la barbarie tecnodepredadora de nuestra especie, ahora intensificada por el sistema capitalista en el que vivimos. Los Jaguares son cada vez más escasos en toda Latinoamérica. Especies como el Oso Hormiguero gigante, el Oso Frontino, la Danta (tapir), el Puma, las palomas igüiras y turcas, el Pato real, el Paujil Copete de Piedra y el Venado Caramerudo van siendo exterminadas con un celo y fanatismo que raya en la locura. Algunas personas pagan el equivalente al oro por platos de carne de animales silvestres en restaurantes que ya ni tan disimuladamente ofrecen este tipo de menús en varias ciudades venezolanas, todo ante la indiferencia de las autoridades. El Ministerio del Ambiente aun otorga permisos para realizar “caza deportiva”, término que aparte de configurar un estruendoso oxímoron denota insensibilidad e ignorancia por parte de quienes institucionalmente están en el deber de proteger a los miembros de nuestra fauna.

La naturaleza es diversa por definición y por necesidad. Millones de años de ensayo y error produjeron la riquísima explosión de formas de vida tan variadas y diferentes como necesarias para la estabilidad y supervivencia de todo el sistema biótico. La energía de la vida circula por los incontables canales de la diversidad; cada vez que clausuramos para siempre uno de estos canales estamos obstruyendo el sistema que nos permite subsistir.
Si sobrevivimos como especie a nuestra propia locura autodestructiva, llegará el día en que generaciones de humanos se horrorizaran y espantaran ante la criminal limpieza biótica que sus antecesores perpetraron en contra del resto de formas de vida de nuestro común hogar.

(*) Joel Sangronis Padrón es profesor de la Universidad Nacional Experimental Rafael Maria Baralt (UNERMB), Venezuela.
Joelsanp02@yahoo.com